EL MAESTRO LIMPIO PIERDE PISO

Por Helga Kauffman

En forma por demás irascible, Dante Delgado Rannauro se empeña en hacer creer lo que nadie cree: el Movimiento Ciudadano “es la verdadera alternativa política en México”.

En forma simplona, burda en la mayoría de las ocasiones, el dueño de MC, había declarado hace dos meses que el candidato presidencial naranja se conocería hasta enero, el día 20, para ser precisos.

El frente opositor y Morena habían designado a sus respectivas abanderadas, pero el MC “se lo tomaría con calma’’.

Pero se le atravesó el payaso neolonés Samuel García, quien con su desmedida ambición – alentada por YSQ – provocó que Delgado aceptara de mala gana abrir un proceso de preselección de su candidato presidencial, en el que el gobernador de Nuevo León, sospechosamente, fue el único que sobrevivió.

Ochenta precandidatos no pasaron ni siquiera el primer filtro naranja, entre ellos la senadora Indira Kempis.

Durante las dos semanas que duró el novelón que tuvo como protagonista a García, Delgado no subió un post, no emitió una declaración ni siquiera un boletín de apoyo ante lo que consideró estos días una “embestida de la vieja política’’.

Ni una palabra de apoyo.

Con el escenario dispuesto para que se cumpla el compromiso de tener a su candidato presidencial en enero próximo, Delgado acudió al lenguaje pandillero para tratar de rescatar los restos del MC en Nuevo León.

“Esto no se va a quedar así’’, amenazó.

No, efectivamente, no se quedará así porque el frente opositor “ya olió sangre” y porque Dante Delgado comenzará a mover sus fichas para que todo se acomode a su favor.

Descartado por propia voluntad Luis Donaldo Colosio Riojas, así como el gobernador de Jalisco Enrique Alfaro, solo quedarían cuatro emecistas con posibilidad de ser candidatos presidenciales:

El frustrado coordinador de campaña de García, Jorge Álvarez Máynez, quien por cierto fue rechazado por el grupo Jalisco, el más influyente dentro del MC.

El senador Clemente Castañeda, que buscó ser candidato a gobernador de Jalisco, sin conseguirlo.

El propio Dante Delgado.

Y el muchachito de “Neza York”, Juan Zepeda Hernández.

El primero quiso madrugar y destaparse como sucesor de García, pero es un desconocido en el país; sería una apuesta perdedora; el segundo tiene más presencia a nivel nacional pero tampoco trae el costal de canicas para jugar la grande; el tercero puede manipular a su antojo al partido, porque es suyo; el cuarto es un aventurero político que lo único que busca es reflectores y ver cuánto le dan para estar en el show.

Cancelada está la posibilidad de que Marcelo Ebrard acepte llegar de emergente porque ya renovó sus votos con Morena, a pesar del maltrato recibido, los astros se le volvieron a alinear al patrón naranja.

De los cuatro mencionados puede ser el que se auto levante la mano y vaya en pos de un sueño que nunca alcanzará.

Quizá lo mejor sea que haga comerciales de líquidos limpia pisos, porque ya tiene la forma.