Desde las elecciones, el peso suma una pérdida de un 17%, el peor desempeño entre una cesta de divisas globales.
El peso mexicano retrocedía en una sesión marcada por fuertes vaivenes después de que la Cámara de Diputados aprobó la reforma judicial impulsada por la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, que desde hace semanas mantiene en vilo a los inversionistas.
El dictamen con los cambios al sistema de justicia, que entre otras cosas plantea la elección mediante voto popular de jueces, magistrados y ministros de la suprema corte, fue turnado al Senado donde se espera que también sea aprobado en los próximos días.
La moneda nacional cotizaba en 19.87 por dólar, con una depreciación del 0.44% frente al precio de referencia de Reuters del martes, aunque poco antes llegó a ganar un 0.52%, y especialistas son poco optimistas sobre su desempeño hacia adelante.
Según la firma ActivTrades, el debilitamiento del peso encontraba una importante resistencia técnica alrededor 20 unidades, con un siguiente nivel clave en 20.20.
Por lo pronto, el retroceso de la moneda en la sesión era parcialmente contenido por un debilitamiento generalizado del dólar tras la divulgación de débiles cifras del mercado laboral estadounidense que impulsaban las expectativas de mayores recortes de tasas por parte de la Reserva Federal.
Desde las elecciones de junio, cuando la aplastante victoria oficialista abrió la puerta a la aprobación de la reforma, el otrora denominado “súper peso” por su solidez frente al dólar, suma una pérdida de un 17%, el peor desempeño entre una cesta de divisas globales.
Analistas temen que los cambios propuestos en la enmienda constitucional debiliten al sistema de justicia de México, poniendo en riesgo el clima negocios en la segunda mayor economía de América Latina.