Las modificaciones a la carta magna incorporan el delito de terrorismo y la aplicación de la pena más severa a quien fabrique o distribuya armas al territorio nacional de forma ilícita.
El Congreso mexiquense aprobó la minuta, enviada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, en materia de fortalecimiento de la soberanía nacional y tráfico ilegal de armas.
De acuerdo con el documento, leído por la diputada María José Pérez Domínguez, el pueblo de México, bajo ninguna circunstancia, aceptará intervenciones, intromisiones o cualquier otro acto desde el extranjero, que sea lesivo de la integridad, independencia y soberanía de la nación, tales como golpes de Estado, injerencias en elecciones o la violación del territorio mexicano, sea por tierra, agua, mar o espacio aéreo.
La reforma, impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, establece que se le impondrá la pena más severa posible, así como la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa a cualquier persona extranjera que realice actividades al margen de la ley, y a cualquier persona nacional o extranjera involucrada en la fabricación, distribución, enajenación, traslado o internación al territorio nacional de manera ilícita de armas.
Puntualiza que no se consentirá intervención en investigación y persecución alguna, sin la autorización y colaboración expresa del Estado mexicano, en el marco de las leyes aplicables; y determina que la persona juzgadora ordenará la prisión preventiva oficiosamente por el delito de terrorismo.
Finalmente, en los artículos transitorios de la reforma, se indica que el Congreso de la Unión y las legislaturas locales deberán hacer las adecuaciones normativas, que deriven de la presente reforma, en un plazo no mayor a 180 días naturales, contados a partir del día siguiente de la entrada en vigor del decreto.