Destaca Ayapango y Metepec por elaborar este tipo de velas.
El arte de la cerería en el territorio mexiquense es muy atractivo y colorido, gracias al talento, creatividad y habilidades que tienen las y los artesanos para crear vistosas velas, ya sean decorativas o aromáticas.
Una de las más peculiares en la entidad son las velas caladas, una innovación que ha permitido extender los campos de venta ya que su estilo único y elegancia amplía sus usos, desde decoración hasta obsequios en diversos eventos sociales y también son útiles.
Este tipo de velas son conocidas por sus espirales y capas de cera de diferentes colores, que después de tallarlas dejan a la vista las diferentes figuras que se hacen a través del color.
El proceso inicia desde los recipientes de cera caliente con diferentes colores, posteriormente se coloca la base de cera en forma de estrella que se va sumergiendo por capas de color y que van endureciendo con agua fría, este proceso se repite varias veces.
Durante el proceso de inmersión la vela se vuelve más caliente y blanda, lo que permite tallarla, además se van remarcando las canaletas que forman la estrella.
Luego, la maestra o el maestro artesano talla la vela antes de que se vuelva demasiado dura, cortan unas tiras que van doblando y dando forma, las capas de diferentes colores quedan al descubierto y resultan muy vistosas.
Repiten el proceso hasta quedar totalmente decoradas, los tamaños pueden variar desde la pequeña que mide ocho centímetros hasta las más grande de 25 centímetros.
En el Estado de México destacan los municipios de Ayapango y Metepec por la elaboración de estos productos.
El Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías del Estado de México (IIFAEM), invita adquirir estas piezas a través de las Tiendas de Artesanías “Casart”, además de pagar un precio justo sin regateo.
