La peleadora mexicana de artes marciales mixtas recibe un reconocimiento por parte de la empresa más importante de su deporte, así como de una leyenda viva.
La UFC está siendo dominada por los peleadores mexicanos, que al momento es uno de los países extranjeros con más campeones en activo, con Brandon Moreno, Yair Pantera Rodríguez, y Alexa Grasso, quien se ha convertido en la mejor libra por libra de la categoría. Tras el anuncio del retiro por parte de Amanda Nunes, la peleadora azteca se quedó con ese puesto, siendo reconocida como la número uno en la categoría femenil.
Alexa terminó por arriba en la lista de peleadoras con bastante renombre en la UFC como Valentina Shevchenko, Zhang Weili, Rose Namajunas y Julianna Peña. Su última batalla ante Shevchenko la colocó en una muy buena posición, registrando un récord de 16-3, y consagrándose campeona del peso mosca de UFC.
Con estos movimientos tras el retiro de la brasileña, todo bastó con esperar a que la lista se moviera para que Alexa consiguiera ese primer lugar entre las peleadoras de artes marciales mixtas.
Desde el año 2019 la mexicana presume de hilar cinco triunfos en la máxima categoría, pues desde que perdió ante Carla Esparza, ninguna otra peleadora la ha derribado hasta el momento. La de Jalisco con 29 años de edad, no solo alcanzó el reconocimiento por parte de la UFC por todo este esfuerzo realizado, sino que una leyenda de los octágonos sintió emoción por ver a la mexicana en el top 1 de la lista.
En redes sociales el periodista especializado en deportes de contacto, John Morgan, desde su cuenta oficial de Twitter publicó la lista donde destacaba en primer lugar la mexicana, informando que Grasso sería la número uno como libra por libra de la categoría femenil, tras el retiro de Amanda Nunes.
Lo sorprendente es que horas después Conor McGregor, peleador irlandés de artes marciales mixtas muy popular en el mundo, reconoció a la mexicana nuevamente desde su perfil de Twitter, compartiendo este listado con el mensaje de “¡Viva México!”.
El peleador estuvo presente en la pelea de Grasso ante Shevchenko, y al ver la sumisión que le aplicó la mexicana para levantar el cinturón, también gritaba a todos lados: “¡Viva México!”.