Durante la Declaración de Palenque, AMLO junto a presidentes y representantes de otro países latinoamericanos acordaron acciones para atender la migración, así como ampliar las vías de regularización para migrantes.
Los presidentes y representantes diplomáticos de México y otros 10 países acordaron en la Declaración de Palenque un conjunto de 13 acciones para atender el problema de la migración, a partir del reconocimiento de las causas y con la implementación de medidas humanitarias, de desarrollo económico, político y social.
Durante el Encuentro Palenque, Por una Vecindad Fraterna y con Bienestar, del que fue convocante y anfitrión el presidente Andrés Manuel López Obrador, los líderes de Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, El Salvador, Haití, Honduras, México, Panamá y Venezuela establecieron el acuerdo para atender las causas estructurales de la migración irregular.
En ese sentido, se acordaron seis áreas prioritarias: autosuficiencia y soberanía alimentaria, con la recuperación del sector agrícola; protección, conservación y restauración del medio ambiente; empleo digno, educación y desarrollo de capacidades técnicas y tecnológicas; seguridad energética, incluyendo energías renovables y avance hacia la descarbonización; autosuficiencia sanitaria y comercio e inversión intrarregional para el desarrollo socioeconómico, y combate al crimen organizado trasnacional, al tráfico de personas, la corrupción, fomentando la cooperación en seguridad.
Como parte del acuerdo signado en Palenque, que presentó la canciller Alicia Bárcena, se puntualizó que México pondrá a disposición inmediata de todos los países que asistieron su cooperación y asistencia técnica de los programas Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro, así como la total cooperación en materia de petróleo, gas, electricidad y energías renovables, la plataforma de organización regulatoria, dedicada a la creación de una agencia de medicamentos de América Latina y el Caribe.
También determinaron “fomentar el comercio intrarregional de bienes y servicios de subsistencia básica, promoviendo preferencias arancelarias, el establecimiento de cuotas y la eliminación de barreras no arancelarias, instar a que se levanten medidas coercitivas unilaterales impuestas a países de la región, en tanto son contrarias al derecho internacional y tienen graves repercusiones, más allá de los países objetivo”.
Se enfatizó que los países de la región que son origen, tránsito y destino de migrantes deben priorizar las políticas integrales que respeten el derecho humano a migrar, resguardando la vida y dignidad de las personas, así como considerando opciones de regularización permanente.
“Hacer un llamado a que los países de destino adopten políticas y prácticas migratorias acordes con la realidad actual de nuestra región, y abandonen aquellas inconsistentes y selectivas, para evitar producir arbitrariamente tanto efectos llamada como efectos disuasivos, tales como la regularización de ciertas nacionalidades”, indicó.
Y agregó: “Solicitar a los países de destino la ampliación de las vías regulares, ordenadas y seguras de migración, con especial énfasis en la movilidad laboral y promover la integración y retorno de los trabajadores temporales”.
Se estableció que cada país apoyará a Haití para que, junto con la comunidad internacional y Naciones Unidas, se restablezca un entorno de seguridad humana para la normalización de la situación política, económica y social, con un enfoque de desarrollo sostenible.
Además, se contempla replantear la arquitectura financiera internacional de la deuda soberana, a fin de permitir a los países, particularmente los de ingreso medio, alcanzar mayores niveles de desarrollo, cerrar las brechas sociales y reducir la intención de migrar, tales como el cambio de deuda universal por autosuficiencia alimentaria, servicios ambientales y acción climática
También se buscará el respaldo de organismos internacionales para brindar atención a las personas migrantes que se encuentren en necesidades especiales de protección en su trayecto, priorizando mujeres, niñas y niños.
Se determinó que se vincularían los acuerdos del Encuentro de Palenque con el de alto nivel sobre migración y desarrollo en América Latina y el Caribe, propuesto por Colombia y México, que integre los mecanismos regionales y subregionales, a realizarse el primer trimestre de 2024.
La canciller Alicia Bárcena resaltó que los jefes de Estado y de gobierno acordaron agregar un acápite adicional al acuerdo: “Proponer a los gobiernos de Cuba y Estados Unidos a sostener en el menor tiempo posible un diálogo integral sobre sus relaciones bilaterales”.