EL ROBO DE IDENTIDAD TUVO 16 MIL CASOS EN 2022, SEGÚN CONDUSEF

Para inhibir la usurpación de identidad, es viable la creación de una dependencia especializada que conozca a detalle el tema a fin de atender de forma más puntual, con personal capacitado, delitos como el robo y secuestro de datos o suplantación de identidad.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), informó que el robo de identidad es un delito que en los últimos años ha crecido de forma exponencial, afectando no sólo a usuarios sino también la reputación de las empresas y es que el organismo aseguró que el número de reclamaciones por este delito creció durante la pandemia un promedio de 11%.

Aunque el ilícito se registra en todo el país de forma generalizada, aún no se encuentra tipificado a escala federal. De acuerdo con el Senado de la República, actualmente más de 50% de las entidades del país cuentan con un marco jurídico local en el que se tiene tipificado este delito; sin embargo, las sanciones varían, tanto en las penas de privación de la libertad como en las multas económicas.

“En este asunto, valdría la pena una homologación de criterios en la legislación del país que permita atender de forma integral el problema, porque el robo de identidad es un detonante para otros delitos como el fraude o las empresas fantasma”, indicó Ricardo Robledo, director general y fundador de Tu Identidad, plataforma especializada en validación de identidad de empresas y usuarios.

Recordó que durante 2022, la Condusef señalo que se registraron más de 16 mil robos de identidad, lo cual pone en desventaja a las empresas, porque se estima que solamente el 23% cuenta con un plan de respuesta para inhibir este tipo de ataques.

Actualmente, en el país en materia de ciberseguridad se encuentran más de una decena de iniciativas en espera de ser aprobadas por el Congreso de la Unión; entre ellas una que contempla incorporar al Código Penal Federal el concepto de delito de robo de identidad, mencionó Robledo.

“Como primer paso, un gran reto a corto y mediano plazo es que las autoridades definan y regulen en el ciberespacio el concepto de identidad digital, para luego legislar y sancionar conductas relacionadas con el robo, la vulneración o la suplantación de la identidad en el mundo digital”, precisó el experto de Tu Identidad.

No obstante, remarcó que para inhibir la usurpación de identidad, es viable la creación de una dependencia especializada que conozca a detalle el tema a fin de atender de forma más puntual, con personal capacitado, delitos como el robo y secuestro de datos o suplantación de identidad.

“Será fundamental en estas organizaciones la capacitación constante del personal a fin de que cuenten con habilidades necesarias para eficientar la persecución de delitos e inhibir técnicas sofisticadas como el phishing, alusiva al envío de correos fraudulentos; pharming, que está relacionado con el uso de virus digitales; el skimming, alusivo al robo de información de tarjetas bancarias; smishing, que se lleva a cabo a través de mensajes de texto, entre otras prácticas ilícitas”, puntualiza el fundador de Tu Identidad”, agregó.

Robledo apuntó que una regulación para combatir el robo de identidad favorece a todo el ecosistema digital, debido a que la acelerada adopción de nuevos modelos de negocio tecnológicos ha obligado a las compañías a replantear sus estrategias para proteger sus operaciones y su reputación de posibles amenazas.