Congreso Mexiquense analiza propuesta de despenalización del aborto

Piden diputados saldar deuda histórica con las mujeres en materia de Interrupción Legal del Embarazo, pero también solicitan abrir el debate e incluir las voces de la sociedad.

La Comisión para la Igualdad de Género del Congreso mexiquense, presidida por la diputada Zaira Cedillo Silva (morena), aprobó un proyecto de iniciativa respecto a la despenalización del aborto en el Estado de México, el cual será turnado a la Junta de Coordinación Política (Jucopo), presidida por el diputado José Francisco Vázquez Rodríguez (morena), para que considere su presentación en la sesión deliberante del 25 de noviembre.

En reunión de trabajo, la legisladora Zaira Cedillo informó que la propuesta para reformar el Código Penal estatal es autoría de la Comisión, y detalló que actualmente hay cinco iniciativas sobre la despenalización del aborto en la entidad: dos de morena, una de MC y una del PRD, las cuales fueron ingresadas en la LXI Legislatura mexiquense; además de que en la actual legislatura la asociación Marea Verde Estado de México presentó una propuesta y la legisladora Paola Jiménez Hernández presentará otra más.

Al compartir que anualmente cuatro mil mexiquenses acuden a la CDMX para realizar este procedimiento, la diputada reconoció que en la Casa del Pueblo se origine su discusión y se coincida en la importancia de la prevención del embarazo, pero resaltó que “no se busca ser omiso ante la realidad de las mujeres y no hay que retrasar más un debate agotado”, por lo que pidió no criminalizar a las mujeres por su derecho a decidir.

La iniciativa establece penas de seis meses a un año de prisión a la mujer o persona gestante que voluntariamente practique la interrupción del embarazo después de las 12 semanas completas de gestación; y la que consintiere que otra persona lo hiciere o practique, con su consentimiento.

Además, cinco a 10 años de prisión, y de 50 a 400 días de multa, a quien comenta la interrupción del embarazo en cualquier momento de la gestación, sin consentimiento de la mujer; y hasta 15 años de prisión, si quien cometa el delito emplea violencia física, psicológica y obstétrica, o negligencia en los cuidados ginecológicos gineco-obstétricos.

En caso de personal médico, enfermería o partería, se suspenderá de tres a seis años su ejercicio en la profesión. Y, en el caso de reincidencia, será por 20 años la suspensión.

La iniciativa entiende por embarazo a la parte del proceso de la reproducción humana que comienza con la implantación del embrión en el endometrio, así como a la persona gestante a cualquier persona con aparato reproductor femenino y con capacidad de gestar, independientemente de su edad, apariencia u orientación sexual.

No se considerará delito, aun cuando se realice después de las 12 semanas la interrupción del embarazo, cuando: sea resultado de una acción culposa de las mujeres; el embarazo sea resultado de una violación, implantación no consentida de óvulo fecundado o inseminado artificialmente, independientemente de si exista o no denuncia; la mujer corra peligro de muerte o su salud se vea afectada a juicio médico, si no se realiza el procedimiento.

De igual manera, cuando existe la prueba suficiente, de acuerdo con las o los médicos, para diagnosticar que el producto sufre alteraciones genéticas o congénitas que deriven en trastornos físicos o mentales graves; se demuestre que la mujer embarazada haya sido ocultada o privada de su libertad por quien tiene una relación sentimental o de confianza con ella; y cuando exista un trastorno ginecológico que haya impedido a la mujer tener conocimiento de su embarazo.