Los servicios que se prestan son deficientes y tanto pacientes como familiares deben sortear múltiples problemas.
El Hospital Nicolás San Juan, ubicado en la Colonia Ex Hacienda La Magdalena, al norte de Toluca, es quizá uno de los ejemplos más acabados de los problemas que deben sortear quienes no gozan con prestaciones sociales.
Durante un recorrido por la zona, se pudo constatar que la situación llega a ser desesperante para quienes deben hacer uso de las instalaciones hospitalarias.
Las quejas son muchas: falta de medicamentos; falta de un espacio digno para pacientes; lugares donde puedan estar los familiares y estacionamientos accesibles.
Hay que mencionar que las personas se ven obligadas a esperar a la intemperie alguna noticia de su familiar internado, ya que deben estar atentos y, por si ello no fuera suficiente, los elementos de seguridad no les permiten acceder al uso de los sanitarios.
Cabe mencionar que, de acuerdo con las denuncias recabadas, en el hospital Nicolás San Juan a los familiares de los pacientes no se les permite pasar ni al baño, pero lo más graves es el desabasto de medicamentos y camillas.
Se indicó que incluso saben que en dicho nosocomio han atendido hasta en las bancas a los enfermos.
Otra queja es por la falta de espacios dignos para esperar noticias de los pacientes internados.
Hace tiempo se colocó un albergue a espaldas de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, el albergue “Amparo Monroy de Ocampo”, que atendería a los familiares de los pacientes internados en el Nicolás San Juan.
Sin embargo, con la irrupción del Covid, fue cerrado y a actualmente está en completo abandono mientras los familiares de pacientes padecen del intenso frío y la lluvia, cobijados con mantas y cartones.
Los que tienen vehículo lo usan para dormir y para hacer sus comidas, pero los que no, deben quedarse afuera a pernoctar.
En el caso de alimentos, coincidieron que no han tenido problema, pues es muy constante la generosidad de parte de la gente que llega y regala atole, café, tamales y comida.
Otro problema que enfrentan, es precisamente la falta de estacionamientos, lo que les obliga a dejar sus automóviles estacionados en el camellón de la Avenida Nicolás San Juan, donde concurren patrulleros y motociclistas a quitarles las placas.
Esta es la realidad de uno de tantos hospitales que atienden a personas que no cuentan con seguridad social, quienes piden al Gobierno del Estado de México atención, que sean tratados, simple y sencillamente, con dignidad.
