Promueve Sherezada Esparza, investigadora de la UAEMéx, uso responsable de plaguicidas

“Participamos con un trabajo para realizar el análisis de suelos, las propiedades físicas y químicas en suelo con presencia de abamectina, que es un plaguicida altamente peligroso”, puntualizó la universitaria.

Promover el uso responsable de los plaguicidas entre los productores de aguacate del municipio de Temascaltepec es uno de los propósitos del trabajo de investigación que desarrolla la catedrática e investigadora del Centro Universitario Temascaltepec de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), Sherezada Esparza Jiménez.

La universitaria indicó que a nivel nacional, el Estado de México ocupa la tercera posición entre las entidades federativas con mayor producción de aguacate; asimismo, precisó, Temascaltepec es el tercer municipio mexiquense con mayor producción de este fruto. “Trabajamos para realizar el análisis de suelos, las propiedades físicas y químicas en suelo con presencia de abamectina, que es un plaguicida altamente peligroso”, puntualizó.

Destacó que esta idea se desprendió del trabajo de investigación que realiza como estudiante del Doctorado en Ciencias Ambientales de la UAEMéx, consistente en “un análisis del factor suelo-planta-aguacate, es decir, qué tan disponible es un plaguicida una vez que se coloca en el suelo y si se transporta hasta el aguacate”.

La catedrática de la carrera de Ingeniero Agrónomo Zootecnista en este campus de la UAEMéx refirió que en el inicio de este proyecto, con apoyo del Comité Estatal de Sanidad Vegetal del Estado de México (CESAVEM), se realizó una caracterización de la producción de aguacate en la zona y se registró un padrón de dos mil 400 productores en Temascaltepec. “Es un municipio grande; sin embargo, no sabíamos que había tanto productor, lo cual tiene como resultado la alta producción”, dijo.

Posteriormente, afirmó, con apoyo de profesores del Centro Universitario y de la Facultad de Química, realizamos la clasificación de los productores, principalmente a partir de cómo trabajan, y se identificó la aplicación de un total de 32 plaguicidas en el municipio, que clasificamos de acuerdo con normas internacionales, siendo tres los de mayor uso: abamectina, malatión y lambda cialotrina.

Esparza Jiménez explicó que esta investigación inició a raíz de que se detectó que los productores siembran de manera tradicional y utilizan plaguicidas sin llevar un control exacto, por ejemplo, de las dosis que aplican.

Tomamos muestras de suelos, hicimos análisis fisicoquímicos y con ayuda de expertos de la Facultad de Química estamos midiendo por cromatografía de alta eficiencia los contenidos que pueden tener en suelo los plaguicidas, detalló.

En particular, acotó, el proyecto para el cual recibimos financiamiento se restringe al uso de la abamectina. “El apoyo nos permitirá comprar los reactivos que nos hacen falta y determinar qué tanto contenido de este plaguicida tenemos en el suelo”, dijo.

De esta manera, señaló, podremos saber si los residuos del plaguicida se transportan a las hojas y, en consecuencia, al aguacate y una vez que tengamos los resultados informaremos a las autoridades y a los productores, principalmente, sobre los potenciales daños que ello puede causar.

Los productores, enfatizó Sherezada Esparza, deber estar plenamente conscientes sobre la relevancia de los resultados de este trabajo, los daños que puede ocasionar el uso irresponsable de plaguicidas y las consecuencias para la salud humana.