El programa “Salvemos Vidas” ha permitió a las autoridades la contención de las personas con la intención de arrojarse a las vías.
En lo que va de 2024, el programa Salvemos Vidas del Sistema de Transporte Colectivo Metro ha realizado 24 acciones de contención psicológica a usuarios que han manifestado ideación suicida al interior de las estaciones de la red.
En total, desde su creación en 2016, se han realizado 723 acciones de contención.
Dicho programa se fortaleció el año pasado, con un módulo permanente de apoyo psicológico que se encuentra en el edificio exterior de la estación Juárez de la Línea 3, en Balderas número 58, funciona de lunes a viernes, de 10:00 a 18:00 horas.
Asimismo, se realizan acciones de psicoeducación en medidas de autocuidado en salud mental y prevención del suicidio a través de módulos itinerantes en la red del Metro, los cuales han impactado en 2024 en alrededor de 2 mil 200 personas.
La noche del miércoles elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, adscritos a las labores de resguardo y vigilancia del Metro, auxiliaron a una usuaria, quien presuntamente pretendía arrojarse a la zona de vías de la estación Pantitlán de la Línea 1.
Los hechos se registraron alrededor de las 20:40 horas, cuando un oficial de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) vio que una mujer se encontraba llorando en uno de los andenes de salida de trenes; al preguntarle si se encontraba bien, ella se intentó arrojar al paso del tren, por lo que el oficial la sujetó del brazo; el teléfono de la usuaria cayó a la zona de vías, a la vez que la conductora del tren en movimiento, logró frenar en alto total.
Por lo anterior, se activó el protocolo del programa Salvemos Vidas, para dar contención psicológica a la usuaria; así mismo, se solicitó el arribó de personal de Seguridad Industrial e Higiene, para una valoración física.
Una de las psicólogas de Salvemos Vidas llegó a la estación Pantitlán, donde por espacio de una hora realizó una contención psicológica en apoyo a la usuaria; también se dio aviso a sus familiares, quienes colaboraron en la labor de apoyo emocional.
La mujer y sus familiares se retiraron por sus propios medios, con el compromiso de continuar un tratamiento psicológico.