El embajador estadounidense habló de ello durante un simposio sobre seguridad en la Ciudad de México.
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, dio a conocer que su gobierno trabaja junto a sus homólogos mexicanos como socios para aumentar las investigaciones y arrestos vinculados al tráfico de armas para romper las redes de traficantes de armas.
El enviado de la Casa Blanca, en una declaración difundida por su oficina, señaló que a través del trabajo entre ambos países y el intercambio de información, en 2023 el gobierno de México registró más de 28 mil armas en el sistema eTrace de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de Estados Unidos.
eTrace es la única herra
mienta con que cuentan las autoridades para intentar dar con los compradores originales de las armas introducidas irregularmente desde Estados Unidos a territorio mexicano y empleadas aquí para cometer algún crimen.
Salazar resaltó que las autoridades estadounidenses iniciaron 655 casos de investigación con 463 arrestos gracias al intercambio de información que se genera a través de eTrace y otros mecanismos de cooperación.
“El sistema eTrace es una herramienta extraordinaria, ya que nos permite rastrear las armas y el camino que recorrieron para desarticular las operaciones de los grupos criminales. Hasta la fecha, 22 estados en México y la Fiscalía General de la República (FGR) tienen acceso al sistema eTrace y está previsto que los últimos 10 estados recibirán acceso antes de 2026, para así cubrir los 32 estados”, dijo.
Añadió que una de las prioridades de la relación bilateral “es detener el flujo de armas y desarticular las redes de las organizaciones criminales transnacionales que las trafican”.
Destacó que “uno de los casos que ilustran los resultados que surgen de dicha cooperación, es la nueva unidad de investigación de tráfico de armas de fuego que lanzaron nuestros dos gobiernos, la cual es la primera unidad de su tipo en el mundo. Su objetivo es interrumpir las redes criminales vinculadas a este delito y se compone por policías de la Agencia de Investigación Criminal de la FGR que realizan carpetas de investigación del Ministerio Público Federal y colaboran con la ATF de Estados Unidos”.