En el lugar el cineasta presentó su nueva cinta, “Megalópolis”, además de platicar de varias situaciones de su carrera.
La noche ha sido de Francis Ford Coppola, el director que a sus 85 años no solo sigue dirigiendo, sino que continúa cosechando éxitos.
El realizador de “El Padrino” y “Apocalyosis now” recibió el Premio a la Excelencia por parte del Festival internacional de cine de Morelia, además develó una butaca con su nombre, que quedará montada en una de las salas del Cinépolis Centro, sede principal del encuentro fílmico.
El director presentó “Megalópolis”, su más reciente filme, en una función especial en el céntrico Teatro Matamoros. La historia es una epopeya romana ambientada en el EU actual, protagonizada por Adam Driver, la cual llegará a salas comerciales nacionales el próximo jueves.
“Me gustaría que la gente que realmente ama al cine fuera a verla, que no la vayan a ver una y otra vez solo porque les han enseñado a hacerlo, sino que abran sus mentes y vean que las posibilidades del cine son mucho más amplias de lo que pueden haber pensado”, dijo a su paso por la alfombra roja.
Contra la tradición, Coppola no se sentó en la butaca develada porque consideró que se movía mucho.
demás el director en un encuentro con la prensa dio cátedra sobre la vida personal y profesional, que rebasan los 80 y 60 años, respectivamente.
Durante una hora, Francis Ford Coppola fue reflexivo y manifestó ideas revolucionarias; aunque también pidió a todos que le llamaran “Tío Panchito” y se dio tiempo para hablar de las próximas elecciones en EU.
En especial habló sobre una de las cintas más icónicas de su carrera, “El padrino”, que, a pesar de que se ha convertido en una película obligada en la cultura popular, en su estreno recibió duras críticas:
“’El Padrino’ pasó por una época en la que la crítica pensaba que era la peor película jamás hecha y hasta me iban a despedir”, dijo.
“’El Padrino II’, cuando la proyecté por primera vez, en San Francisco, al público no le gustó, la odiaron y odiaron la actuación. La razón era porque la ilusión no funcionaba, porque pasaba del pasado al futuro cada 10 minutos y entonces lo que hice fue cambiarlo para que pasara del pasado al futuro cada 20 minutos. Cuando hicimos esos cambios en San Diego, amaron la película y amaron la actuación”, recordó.
Algo similar pasó con “Apocalypsis now”, protagonizada por Marlo Brando. Cuando fue proyectada en cines, la gente la destrozó, pero ahora es reconocida como una obra maestra.