Comerciantes establecidos en avenida Tláhuac se manifestaron en el Zócalo capitalino.
Comerciantes establecidos en avenida Tláhuac, quienes fueron afectados con el derrumbe de la Línea 12 del Sistema Transporte Colectivo (STC) Metro, se manifestaron en el Zócalo capitalino para pedirle al jefe de Gobierno, Martí Batres, que atienda sus peticiones y separe de su cargo al secretario de Desarrollo Económico, Fadlala Akabani, por no resolver su situación.
Los inconformes explicaron que, con 97 pesos diarios, como les ofrecieron de apoyo por parte del Gobierno capitalino, es una cantidad extremadamente baja, para que puedan sobrevivir y no se compara con todo lo que han perdido al cerrar sus locales por el accidente.
Bajo las consignas de: “Nosotros, también somos víctimas de la Línea 12; no somos fantasmas o queremos solución”, bloquearon por más de 30 minutos la avenida 20 de noviembre y puntualizaron que son 205 comerciantes establecidos afectados.
Entre sus denuncias los manifestantes explicaron que 97 pesos diarios únicamente pueden comprar un kilo de huevo y un litro de aceite, por lo que dicha cantidad englobada en 96 mil pesos, cerca de mil días que han recibido el apoyo, resulta insuficiente y raquítica ante el quebranto de sus establecimientos.
“Realizamos esta protesta pacífica para aclararle al nuevo Jefe de Gobierno, Martí Batres, que no somos delincuentes, somos víctimas como tales nos deben tratar, no con el desprecio y la soberbia de Ricardo Ruiz, nuevo secretario de gobierno y de Fadlala Akabani, secretario de Desarrollo Económico de quien pedimos su renuncia, “, dijo Alina Vázquez una de las comerciantes afectadas.
La siguiente vía podría ser el amparo contra la Gaceta del Gobierno de la Ciudad, ya que no todos los comerciantes quedaron inscritos en la convocatoria que hizo la Administración local para indemnizarlos.
Por ello, buscarán una asesoría legal para que lleve su situación y la puedan expresar ante los magistrados del Poder Judicial de la Federación, que no están sometidos al capricho de las autoridades de este país, y mucho menos de los gobernantes de esta ciudad.
“No queremos ir por la vía larga, no tenemos tiempo, sino se soluciona como corresponde, los comerciantes se van a ir y van a perder su patrimonio”, advirtieron.