La presidenta Claudia Sheinbaum fue firme al mencionar que no habrá protección para funcionarios públicos relacionados con la delincuencia organizada. Esto como resultado del “Operativo Enjambre” que se realizó en días pasados, donde se detuvieron a una alcaldesa, un director del DIF y cinco mandos de seguridad de diferentes municipios del Estado de México.
La mandataria hizo mención que en todos estos casos se tenían órdenes de aprehensión que emitió un juez del
Tribunal Superior de Justicia del Estado de México, todo a raíz de las carpetas de investigación de la Fiscalía del Estado de México.
Sheinbaum mencionó que este vínculo entre autoridades y delincuencia “es lo peor escenario que puede ocurrir”, pues no debe existir la corrupción que pueda generar escaladas en la violencia.
“No debe de existir, que un presidente municipal o un jefe de policía municipal de cualquier nivel este involucrado con la delincuencia, ni mucho menos estar protegido”, dijo.
Afirmó que su estrategia de seguridad es completamente distinta a la del expresidente Felipe Calderón, durante lo que él llamó su “guerra contra el narcotráfico”
“Porque en la guerra contra el narco, ¿qué hacían?, todo quedaba fuera de la ley, había incluso homicidios extrajudiciales por parte de la autoridad. No, aquí no, aquí hay investigación e inteligencia con pruebas que son judicializables para tener una orden de aprehensión”, sostuvo.
Señaló la mandataría que es importante atender las causas que generan estos escenarios, y será de manera permanente, ya que sin atenderlos no existirá la paz.
Durante el “Operativo Enjambre”, resumió la presidenta se detuvo a una alcaldesa y a siete funcionarios, a los cuales un juez les dictó prisión preventiva.
El operativo contó con la participación de más de mil 500 elementos de la Secretaría de la Defensa, Marina, Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad.