Las sanciones económicas pueden ir desde los 500 pesos hasta llegar a los 100 mil pesos, dependiendo de cada caso.
La actividad turística de la Zona Arqueológica de Teotihuacán disminuyó hasta un 60%, desde que las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), prohibieron el ascenso a las pirámides del Sol y la Luna –al inicio de la pandemia del Covid-19-.
Fueron trabajadores del lugar quienes dieron a conocer que al menos 150 trabajadores y por lo menos 500 artesanos dependen de esta zona arqueológica, a la cual acuden mensualmente alrededor de 25 mil turistas y visitantes.
Refieren que se tenía una mauo afluencia de visitantes cuando el acceso a las pirámides era permitido, durante los fines de semana, registraban un total de 30 a 40 mil turistas.
Cabe señalar que desde la reapertura del recinto tras la pandemia del Covid se prohibió subir a las pirámides de la Luna y el Sol de la llamada “Ciudad de los Dioses”, misma medida que no se ha removido hasta la fecha. Previamente se restringía únicamente en eventos masivos, como en el equinoccio de primavera, pero la Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas en México, establece regulaciones específicas para la protección y conservación de estos lugares considerados patrimonio cultural de la nación. Según esta ley, subir o acceder a áreas restringidas sin autorización puede resultar en sanciones económicas para los infractores.
Las multas por estas infracciones se calculan en Unidades de Medida y Actualización (UMAs), cuyo valor se actualiza anualmente. La cantidad exacta de estas depende de la gravedad del daño causado al patrimonio, pudiendo ir desde sanciones menores para daños leves hasta multas significativas en casos de daños mayores o irreparables a los monumentos o zonas arqueológicas.
Actualmente, las sanciones económicas pueden ir desde los 500 pesos hasta llegar a los 100 mil pesos, dependiendo de cada caso.