A pesar de que las delegaciones de ambos países mantuvieron un diálogo comercial, ahora las decisiones deben ser tomadas por los liderazgos máximos de ambas naciones.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tienen previsto sostener una llamada hoy por la mañana; unas horas antes de que termine el plazo fatal para negociar las tarifas comerciales de 30 por ciento que impuso el republicano.
El objetivo de la llamada será para discutir las propuestas de México destinadas a evitar la entrada en vigor de aranceles del 30% el 1 de agosto.
La presidenta de México informó que su conferencia se realizará a las 10 de la mañana, previsiblemente después de la llamada con Trump. Para esa hora ya podría existir algún acuerdo.
Mientras que el presidente de Estados Unidos escribió en su red social que este día tendrá una agenda llena para alcanzar acuerdos comerciales.
Los Estados Unidos ha mencionado que otros países le están haciendo múltiples ofertas para lograr una reducción de tarifas, otros países están ofreciendo una reducción arancelaria.
El ambiente de negociación se percibe en el ambiente político y la prensa estadounidense. Según eportes esto podría afectar a países como México, además de incluir a varios de los principales socios comerciales de Estados Unidos, como Canadá y Taiwán.
Esto ha provocado que sus líderes, así como los funcionarios de otras economías importantes, se apresuren a intentar conseguir un acuerdo o una prórroga de última hora, aunque la mayoría se muestra pesimista ante esta posibilidad.
En el caso de México, la situación es muy seria, ya que es uno de los socios más vulnerables a las tarifas aduaneras porque que el 80% de sus exportaciones tienen como destino Estados Unidos.
Trump ya impuso aranceles a las exportaciones automotrices y siderúrgicas de México, pero excluyó las partidas incluidas en el tratado de libre comercio de América del Norte, T-MEC, del que también forma parte Canadá.
Las nuevas tasas para México son superiores a la que Trump había impuesto a principios de este año, que era del 25%, aunque los productos que ingresan a Estados Unidos bajo el tratado de libre comercio de América del Norte (T-MEC) están exentos.
Con esto, la segunda economía más grande de América Latina podría verse muy perjudicada si se concreta la amenaza de un 30% adicional de aranceles.
Se desconoce con precisión cuáles productos se verán sometidos a los aumentos de tarifas aduaneras, pero, antes de la ofensiva arancelaria de Trump, México exportaba una gran cantidad de vehículos y piezas, electrodomésticos y electrónica, alimentos como café, aguacate, tomate, tequila o cerveza y bienes siderúrgicos como acero y aluminio.
Por el momento, solo cinco países han llegado a acuerdos comerciales con la administración Trump: Gran Bretaña, Vietnam, Indonesia, Filipinas y Japón.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard ya ha señalado que “ya todo lo que México tenía que hacer está hecho” en las negociaciones con Washington y ahora solo queda esperar. “Mi perspectiva es positiva, vamos a ver en qué resulta”, aseguró.
La presidenta Claudia Sheinbaum dijo que espera que pueda haber un buen acuerdo con Estados Unidos. “Al final, la decisión la toma el presidente Trump, pero esperamos que pueda haber un buen acuerdo por la relación que estamos teniendo”, dijo en su habitual rueda de prensa matutina.
