La Directora General de Probosque en el Estado de México indicó que en temporada de estiaje es muy fácil que se prenda el pastizal y crezca el fuego, por lo que debido a la velocidad con la que se propaga el fuego es inminente que haya incendios importantes.
En lo que va del año se han registrado 61 incendios forestales y pese a que comenzaron después en comparación con la temporada del 2022, hasta el momento va el mismo número de casos, con un aproximado de afectación de la misma superficie, que alcanza las 400 hectáreas, el 80% pastizales, sin llegar al daño de arbolado nuevo, informó Mireya Salas Carrillo, Directora General de la Protectora de Bosques (Probosque) del Estado de México.
Señaló que el comportamiento de los incendios ha variado, antes en enero había entre cuatro y cinco por día, actualmente se duplican, alcanzando 11 o 12, y una media de ocho por día.
Explicó que la causa de las conflagraciones sigue siendo en 85% provocado por la gente, cuando visitan las áreas naturales protegidas y dejan colillas, o en la carretera si dejan cristales o realizan fogatas.
Indicó que en temporada de estiaje es muy fácil que se prenda el pastizal y crezca el fuego, por lo que debido a la velocidad con la que se propaga el fuego es inminente que haya incendios importantes.
“La temporada en que más se registran este tipo de siniestros es durante la época en que hace calor, pues a la actividad humana se suman las altas temperaturas, es el momento en que más incendios se presentan y para prevenir la meta es superar las 782 brechas cortafuego del 2022”, acotó.
Los municipios en los que prevalecen mayormente estos incendios son Valle de Bravo, Ocuilan y Nicolás Romero; sin embargo, precisó que el número de incendios en territorio mexiquense no representa la afectación de superficie, es decir, en comparación con municipios con menor número de incendios, la superficie afectada es mayor.
“Es un dato muy importante porque el Estado de México se coloca en los primeros lugares debido al número de conflagraciones, pero el daño no es tan grave, gracias a la capacidad de respuesta de Probosque y la coordinación con otras instancias y brigadas, lo que reduce la afectación”, subrayó.
La directora general agregó que a la fecha llevan un total de mil 92 quemas controladas, así como 119 kilómetros de líneas negras y capacitación para los municipios y actividades preventivas.
Actualmente Probosque cuenta con 100 brigadistas y la meta es llegar a 300 de manera permanente a partir del 2023. En el ejercicio de quema controlada que se llevó a cabo este día, participaron seis brigadas de Probosque, 60 combatientes de diversas corporaciones en la quema controlada de una hectárea, un ejercicio que realizan las dependencias durante esta temporada con la finalidad de reducir considerablemente el daño en zonas boscosas.
Estas quemas se realizan en dos horas, pues deben preparar los cinturones del área con líneas negras para evitar que, en caso de que el fuego se comporte de manera difícil, no haya riesgos, dijo el jefe de departamento de incendios forestales por parte del gobierno del estado, José Méndez.