El mariscal de campo arremetió contra la NFL y la incomodidad que tienen en los entrenamientos con las cámaras.
Aaron Rodgers, exmariscal de campo de los Green Bay Packers se encuentra molesto porque sería blanco de la serie al dejar entrar las cámaras al campamento, pero no se toma en cuenta que sería en una etapa que podría resultar contraproducente por el periodo de adaptación.
Pues bien, ahora la noticia es el propio Rodgers y su head coach Robert Saleh, quienes arremetieron contra la NFL, diciendo abiertamente que fueron obligados y que dicha intromisión resulta incómoda, al menos para ellos.
Rodgers dijo a KPIX Sports de CBS en una entrevista durante el American Century Championship de Golf en Lake Tahoe: “Nos obligaron y ahora nos lo tenemos que tragar” cuando éste le preguntó sobre el reality y la participación de los Jets en esta temporada. Y prosiguió: “Obviamente hay muchos ojos puestos en mí, demasiadas miradas en nuestro equipo, y muchas expectativas sobre lo que podremos lograr (…) Entiendo el atractivo con nosotros, pero nos obligaron y ahora tenemos que lidiar con esto”, no sin hacer una evidente mueca de resignación.
Por su parte, el Head Coach, Robert Saleh también fue terminante ante las circunstancias y dijo tajante a medios locales que no comparte la iniciativa porque vulnera la intimidad de la plantilla y de los entrenamientos. Saleh dijo abiertamente hace más de un mes que los Jets no estaban interesados en aparecer en ‘Hard Knocks’, pero la realidad terminó siendo otra.
“Sé que hay varios equipos a los que les encantaría que estuvieran en sus instalaciones, pero nosotros simplemente no somos uno de ellos”, concluyó Saleh.