Por Luis Pinal Da Silva
En los últimos años – cinco para ser exactos – México se ha convertido en el hazmerreír de la comunidad internacional.
Con gazapos intencionales o fortuitos, lo cierto es que la clase política nos ha llevado al descrédito como país.
Pareciera que este 2024 son tiempos de truenos y trúhanes.
Truenos y centellas. Así podría titularse una cinta que mostrara al dueño del partido naranja, Dante Delgado Rannauro, quien no tuvo más remedio que tragar medio kilo de sapos grandes – o una caja de camotes crudos – y aceptar que Jorge Álvarez Máynez sea el candidato presidencial de su partido.
La cuestión es que el veracruzano no fue el que hizo la presentación, a pesar de ser el dueño de la franquicia, sino Samuel García, supuesto representante del cambio, que en una de esas le quita el control del Movimiento Ciudadano al jarocho.
Hubo un signo inequívoco de que Álvarez Máynez tendrá en contra a su presidente: el veracruzano se negó a levantarle la mano en su presentación como precandidato presidencial.
Arreglen su papeleo. Sería la segunda cinta que puede causarle sorpresa, náusea y temor, todo al mismo tiempo.
Y es que, para poder ocupar como encargado de despacho la Fiscalía de Justicia de la CDMX, Ulises Lara López necesitaba el título de Licenciado en Derecho y tener una experiencia mínima de cinco años en el ámbito del aparato judicial.
No lo cumplía, ya que es Licenciado en Sociología y, aun así, la ex fiscal a la que Morena le rindió tributo como héroe nacional lo designó encargado de despacho.
Pero en la trama aparece por arte de magia una institución patito, el “Centro Universitario Cúspide de México’’, que le expidió a dicho funcionario el título que necesitaba para ejercer de fiscal sustituto.
La fecha de expedición de dicho documento solo dice “enero del 2024’’.
Es evidentemente un fraude a la ley, en que participó la Fiscalía de la CDMX, la SEP y su Dirección General de Profesiones y, desde luego, el gobierno de la capital.
¿Cómo puede ser posible que eso ocurra sin consecuencias? ¿Nos hemos convertido todos en unos cínicos que el tema solo nos da para hacer memes y no para exigir responsabilidades?
El golpe traidor. Esa es la tercera cinta, que ha sido de terror absoluto, ya que los tres magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que encabezaron el golpe en contra de Reyes Rodríguez Mondragón, votaron a favor de que la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, ponga y disponga de los cargos del Instituto como le parezca.
Mónica Soto, la nueva presidenta muy plegada a los intereses de Morena, señaló que Taddei goza de la autoridad discrecional que le concede la ley para mantener las 10 posiciones importantes del Instituto que ahora están en manos de “encargadurías’’, hasta el término de la elección.
Dicho de otra forma, Soto y sus dos socios, avalaron acabar con la carrera electoral de la que los hoy expresidentes del INE habían sido celosos guardianes.
La decisión también amenaza el carácter colegiado del INE, en donde las decisiones se toman por mayoría de los votos de los 11 consejeros electorales.
Digan lo que digan, parece que los augurios sobre la colonización de los órganos electorales, avanza.
Son tres cintas de terror y de risa loca, sin contar aquella que es protagonizada por el inquilino de Palacio Nacional y que lleva por título: “El traje del emperador”.
Grotesco lo que sucede en nuestro país.