Anpec pide a Cofepris y Profeco verificar la calidad del hielo; “Se espera un verano muy pesado”, alerta.
El desabasto de hielo es grave en la Ciudad de México, pero a la escasez se suma la duda de que el producto que se puede encontrar y comercializar, sea apto para el consumo humano, porque no se tiene garantizada la potabilización del agua, alertó Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
El dirigente de la Anpec alertó que cuando se rebasa la demanda de producción, como sucedió en reciente ola de calor, se deben cerciorar los procesos de producción del hielo, ya que –de manera general– proviene del agua de la red, misma que ha aparecido contaminada en distintas alcaldías de la capital, provocando daños en la salud de la ciudadanía.
Por ello, hizo un llamado a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) a monitorear permanentemente la calidad del hielo que venden las empresas en la capital del país, ante el problema del agua contaminada que vecinos de Benito Juárez, Álvaro Obregón, Iztapalapa y Coyoacán han denunciado.
Aunado a ello, mencionó que las autoridades capitalinas como el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) deben revisar las tuberías de la capital del país, pues explicó que parte del problema del desabasto de hielo, se origina por la escasez de agua que azota a la metrópoli. Dijo que por cada 10 litros de agua que llegan a las tuberías, se pierden seis y solo cuatro llegan a los hogares.
En tiendas de abarrotes, de autoservicio y conveniencia, no hay hielo y los vendedores expusieron que parte del problema es que no les han surtido desde hace varios días, y que cuando hay, se llevan de 15 a 20 bolsas por persona.
Esta cifra aumentó exponencialmente durante las últimas semanas. Las empresas regularmente surten a los establecimiento con un total de 80 bolsas de hielo, mismas que se acaban normalmente en cinco días –de acuerdo con una vendedora de tienda de autoservicio–, pero durante la pasada ola de calor que llevó hasta los 34 grados a la capital del país, todo el hielo se acabó en menos de 24 horas.
Sin embargo, hasta el momento la mayoría de tiendas no han restringido la venta de bolsas de hielo a pocas unidades, a excepción de una tienda de conveniencia, que deja comprar solo cuatro bolsas por la alta demanda del producto.
El dirigente de la Anpec añadió que el problema se agrava debido al “Hielo de Cuota”, que las empresas apartan a los bares y restaurantes de la Ciudad. “De toda la producción de hielo que hay en la Ciudad, los bares y restaurantes demandan mucho hielo para su negocio, y lo que resta se vende a los ciudadanos, esto genera desventaja ante el abasto de cuota”.