Destacan la importancia de aprender a identificar las señales de alarma para atender oportunamente trastornos de salud mental que lleven al suicidio.
En materia de salud mental, la prevención es parte fundamental para apoyar a quienes presentan algún trastorno que puede derivar situaciones más complejas, como quitarse la vida; por ello, los profesionales de la medicina se preparan para hacer frente a este problema, afirmó Rodrigo Rodríguez Briseño, Coordinador de Salud del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
Al encabezar la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, en representación de la Secretaria de Salud estatal, Macarena Montoya Olvera, afirmó que este sector ha reorientado su atención hacia este tema, que es parte importante para el sano desarrollo de cada persona.
Eduardo Marbez Serio, titular de la Oficina de Salud Mental y Grupos Vulnerables de IMSS-Bienestar en el Estado de México, afirmó que el mayor reto en la vigilancia a los trastornos es interactuar con el paciente para identificar el dolor emocional, pues enfrentan una lucha interna que no se debe ignorar, para de esa manera identificar y atender oportunamente señales de alarma.
Añadió que se debe crear empatía para apoyar a quienes están en riesgo de suicidio, pues la labor del profesional médico no termina en la consulta, debe complementarse con acciones de compañía y creación de redes de apoyo; además de que la salud mental debe dejar de estigmatizarse, relegarse y ser un tema tabú, por lo que el principal compromiso es construir un sistema de salud en el que todas las vidas cuenten.