Sin ningún temor los cárteles del narcotráfico en su afán por construir imperios de fentanilo, pusieron en la mira a un nuevo sector, estudiantes de química de las universidades mexicanas, con un claro objetivo; el de hacer una droga más resisten y fuerte para poder vender a los consumidores.
Así es como lo mencionó The New York Times, en un reportaje donde logró entrevistar a siete “cocineros” de fentanilo, en ese lugar, al menos tres, son estudiantes de química, dos agentes de alto rango y un reclutador de alto nivel del cártel de Sinaloa, la meta de esta organización criminal es sintetizar los compuestos químicos que son esenciales para fabricar fentanilo, lo que los liberaría de tener que importar los precursores de China.
Las autoridades estadounidenses aseguran que de cumplirse este objetivo esto marcaría el comienzo de una nueva y aterradora fase en la crisis del fentanilo, en la que los cárteles mexicanos tendrían más control al contar con una drogas más mortífera y lucrativa.
Según lo que menciona el reclutador de alto nivel del cártel de Sinaloa, quien es el encargado de buscar a los estudiantes, antes de que los alumnos sean parte de la organización, los candidatos deben tener conocimientos teóricos e inteligencia callejera, una persona emprendedora que no se acobarde a producir droga y, sobre todo, alguien discreto.
Para identificar a los posibles candidatos, el cártel explora el entorno del estudiante, contacta a sus amigos, la gente con la que reúne, todo para saber si estarían dispuestos a hacer este tipo de trabajo. Si el reclutador encuentra a alguien prometedor, puede ofrecerle cubrir el costo de la matrícula escolar para después trabar para el cártel.
Este “reclutador” menciona que todo el trato es como se realiza en un trabajo “normal”; “somos una empresa, lo que hace una empresa es invertir en sus mejor perfiles”, dijo el reclutar, al medio estadounidense.
Uno de los estudiantes que ahora forma parte de la organización y cursa el segundo año de la carrera de química dijo que el reclutador lo visitó el campus le ofreció 800 dólares por adelantado, más un salario mensual de 800 dólares, el doble del salario de los químicos empleados en México.
El joven quien proviene de una zona pobre de Sinaloa, dijo que elegido estudiar química porque su padre tiene cáncer y que busca ayudarlo a encontrar una cura.
El medio estadounidense asegura que tanto, el reclutador como los estudiantes no han logrado hasta el momento producir precursores, pero que siguen haciendo pruebas.
El fentanilo, 100 veces más poderoso que la morfina, puede ser extremadamente rentable incluso en pequeñas cantidades, lo que significa que un solo mensajero puede contrabandear cantidades lucrativas de la droga simplemente escondiéndola en la guantera del auto o bajo la ropa.
El consumo de fentanilo en pequeñas dosis es mortífero, es posible morir al ingerir un par de miligramos. En los últimos cinco años, el fentanilo se convirtió en la principal causa de muerte entre los adultos jóvenes en Estados Unidos, matando a personas entre 18 y 45 años.
Más del 80 por ciento de las personas condenadas por tráfico de fentanilo en la frontera entre México y Estados Unidos son norteamericanos, según datos federales.