La fabricante de aviones, Boeing destituyó a su presidente ejecutivo, Dennis Muilenburg, luego de un año de intenso escrutinio y problemas provocados por dos accidentes de su avión 737 MAX.
La salida de Muilenburg ocurre cuando el fabricante de aviones más grande del mundo intenta obtener aprobaciones de los reguladores para que pueda volver a volar su avión de pasajeros más vendido y recuperar la confianza de usuarios y aerolíneas.
El presidente del directorio, David Calhoun, asumirá también el cargo de presidente ejecutivo a partir del 13 de enero, dijo la compañía.
Las acciones de Boeing, que han caído más del 20 por ciento desde marzo, subían más del 2 por ciento, a 335.24 dólares, en las primeras operaciones de la jornada.