El mandatario pidió a los gobiernos que deben esperar el conteo final y respetar los que los venezolanos decidieron.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuestionó la injerencia en Venezuela de otras naciones que piden transparencia en los resultados que le dieron una nueva victoria electoral al presidente Nicolás Maduro, y llamó nuevamente a aguardar los números finales de los comicios.
López Obrador cuestionó si los gobierno de otros países no tienen cosas que hacer, como meterse en asusntos de otros países y dejar el injerencismo.
López Obrador pidió que esperen a que se den a conocer los resultados del dictamen preliminar que dan la victoria a Nicolás Maduro para un tercer mandato al frente de Venezuela.
El mandatario aseguró que es necesario se den a conocer los resultados concretos, no nada más la cifra general.
Pidió esperar al avance del cómputo de votos: no descalificar ni un sentido ni en otro, esperar.
El presidente afirmó que lo más importante es que no haya violencia, y destacó que, aunque se manifestó gente el día de la elección, todos los venezolanos actuaron de manera responsable, no hubo violencia, y seguir exhortando a eso, convocando a la no violencia. Desde luego pueden haber protestas, pero pacíficas y no queremos la confrontación.
Unido a esto, aseguró que es necesario que los países, más allá de su tamaño, respeten la autonomía de Venezuela y de cualquier país en estos casos, ya que qué se tienen que estar metiendo en asuntos de otros países.
El departamento de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) dijo que no puede reconocer los resultados en Venezuela y cuestionó que la autoridad electoral solo hizo un anuncio más de seis horas después del cierre de la votación, no dio detalles de las mesas procesadas ni publicó las actas.
Los gobiernos de Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay exigieron temprano la revisión completa de los resultados con la presencia de observadores electorales independientes”.
Estados Unidos acusó de manipulación electoral y represión y dijo que el anuncio de que Maduro había ganado un tercer mandato había sido despojado a la elección de cualquier credibilidad.