En Otumba exigen apoyar para parar los incendios forestales

Ante lo que llaman falta de apoyo, queman llantas y cartón a la puerta de la Presidencia Municipal.

Otumba se convirtió en un polvorín, luego de que los habitantes se manifestaran en la Presidencia Municipal para exigir a las autoridades implementen acciones para combatir los incendios forestales que afectan la zona.

Habitantes de las comunidades de Buenavista, San Marcos y Ahuatepec, se manifestaron en el edificio del Ayuntamiento para exponer su descontento frente a la nula respuesta de las autoridades locales ante incendios forestales que llevan activos seis días.

La protesta, que incluyó la quema de llantas y cartón en la entrada del palacio municipal, subraya una creciente preocupación por la gestión ambiental y la seguridad de las comunidades afectadas.

El conflicto se centra en la falta de apoyo para combatir un incendio en la parte alta de Xochihuacán y el ejido de Buenavista.

Al respecto, Patricio Vergara Rivas, Comisariado Ejidal de Buenavista, informó que el fuego ha consumido más de 100 hectáreas, afectando áreas arboladas, pastizales, así como especies locales como magueyes y nopales.

Hay que mencionar que el presidente municipal, Hilarión Coronel Lemus, ha sido acusado de falta de acción efectiva y, de acuerdo con Vergara Rivas, la visita del presidente municipal el pasado jueves fue percibida como insuficiente, acusándolo de priorizar la imagen pública sobre la acción concreta. Las críticas se enfocan en la falta de presencia en zonas críticas y la difusión de información presuntamente inexacta sobre el control del incendio.

Ante la percepción de abandono por parte del gobierno local, los vecinos se manifestaron en la alcaldía el lunes, prendiendo fuego a llantas y cartón en la entrada, como un acto simbólico para que las autoridades experimentaran el olor a humo que ellos han soportado. Durante la protesta, hubo enfrentamientos menores con la policía municipal.

Los vecinos indicaron que, tras las manifestaciones y la visibilidad del descontento comunitario, diversas direcciones del ayuntamiento ofrecieron su colaboración. Sin embargo, no se detalla hasta qué punto estas ofertas de ayuda se han concretado en acciones efectivas.

Este incidente refleja problemas más amplios relacionados con la gestión de crisis ambientales y la respuesta de las autoridades locales. La frustración de la comunidad parece surgir de una combinación de falta de recursos, planificación inadecuada y una comunicación deficiente entre el gobierno y los ciudadanos afectados.