López Obrador prevé violencia de “infiltrados” en la marcha del 8M

Consideró que la lucha de las mujeres es “de lo más justo” pero señaló que en esta se infiltran mujeres, incluso hombres encapuchados para destruir.

El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió desde Tamaulipas, que se prevén actos de violencia impulsada por “infiltrados” durante la marcha de este viernes 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.

Expuso que la lucha de las mujeres es “de lo más justo” pero señaló que en esta se infiltran mujeres, incluso hombres, encapuchados, para tirar piedras, y usan sopletes y marros para destruir.

Estos comentarios del jefe del Ejecutivo federal se hicieron cuando criticaba los actos violentos de este miércoles cuando normalistas de Ayotzinapa derribaron la puerta de Palacio Nacional.

“Yo cuando veo actos así violentos, por ejemplo, ahora que seguramente se va a envallar el Palacio porque viene, mañana es el Día de la Mujer, es un movimiento de lo más justo que tiene que ver con la lucha por la igualdad de las mujeres, ah, pero se infiltran, y llegan algunas mujeres y también hombres encapuchados a tirar piedras con sopletes, con marros a destruir”.

El presidente López Obrador acusó que estos actos son “extremismo” que no tiene nada que ver con lo revolucionario,

“Es más, ni siquiera tiene que ver con el anarquismo, porque el anarquismo es de transformación”, dijo.

En este sentido, aprovechó estos señalamientos y pidió escuchar la canción “No vivo en una sociedad perfecta”, del trovador cubano Pablo Milanés y en donde destacó de la letra de la canción el extracto: “El extremista y el cobarde van convergiendo en su dolor, mientras el resto con amor trabaja porque se le hace tarde”.

Respecto al portazo, dijo que aunque no hay investigación formal por la irrupción de manifestantes por el caso Ayotzinapa en Palacio Nacional, sugirió que ya sabrán si fue una provocación por parte del grupo opositor y de organizaciones en defensa de derechos humanos, aunque en un inicio aseguró que “eso me huele más al PRI”.

Aseguró que es un cóctel y “un vulgar acto de provocación” en la que su administración no va a caer porque buscan mostrarlo como represor.

De nuevo se lanzó contra la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, contra las organizaciones que han acompañado a los jóvenes y contra el senador Emilio Álvarez Icaza.

Al inicio de su postura el presidente también culpó a los medios de comunicación: “Creo que a la vista de todos porque fue mucho muy difundido, por la actitud de los medios de manipulación de los medios en nuestro país todo esto que significa escándalo, amarillismo, sensacionalismo, todo lo que suponen nos afecta se magnifica”.