La lluvia y una mala decisión de su equipo provocaron que el piloto mexicano volviera a quedarse sin podio en el GP de Países Bajos.
En una carrera vibrante, donde la lluvia hizo de las suyas, “Checo” Pérez tuvo un mal cierre de competencia para quedarse sin podio en el Gran Premio de Países Bajos. Una sanción de cinco segundos por rebasar el límite de velocidad en el pit lane previo al último relanzamiento impidió que el mexicano por primera vez subiera al pedestal en Zandvoort, trazado en el que de nuevo dominó Max Verstappen, quien cosechó su noveno triunfo consecutivo por delante de Fernando Alonso y Pierre Gasly, quien se vio beneficiado por el castigo del tapatío.
Pérez Mendoza se conformó con el cuarto puesto de esta carrera paranoica que obligó a diversas estrategias, propició dudas, errores y aciertos gracias al clima que se convirtió en protagonista. La lluvia primero fue aliada y luego adversaria de “Checo” en un circuito en el que se preveían pocos rebases.
Además de la desatención del mexicano y la inclemencia del tiempo, los mecánicos también tuvieron que ver en el trascurso del GP de Países Bajos, pasaron de héroes a villanos, de concretar cambios rápidos de gomas, en la penúltima parada tardaron hasta 10.9 segundos.
El tapatío comenzó con blandos, aguantó la séptima posición de la largada y fue el primero en entrar a pits en el segundo giro, de los 72 pactados, una vez que las gotas comenzaron a caer en el trazado de Zandvoort. Esa decisión de montar gomas intermedias fue relevante para marcar el futuro de Pérez en la carrera.
Un choque de Sargeant provocó el auto de seguridad en el giro 17 para que las distancias se recortaran entre todos.
A falta de 10 vueltas el diluvio regresó de manera más fuerte para forzar a una nueva detención. A partir de aquí no todo fue bueno para el mexicano, quien primero tuvo una pésima parada de 10.9 segundos para poner intermedias y si bien mantuvo el segundo sitio porque Alonso y Albon se detuvieron, después perdió el control en el giro 63.
“Checo” se fue de largo en la curva uno para ceder el segundo lugar a Alonso. Si la lenta detención no hubiera sucedido, el tapatío sin problemas hubiera defendido ese segundo puesto contra el español ya que pese al semi trompo volvió a pista con su propia maniobra.
El aguacero aumentó para obligar otro ingreso a pits. Pérez se detuvo para cambiar intermedias por las wet, por lo que bajó al sexto puesto, pero ya no volvió a pista en ese momento debido a que apareció la bandera roja por dos circunstancias, por la incesante lluvia y porque Zhou se pegó contra el muro.
Race Control informó que se mantenían las posiciones de una vuelta anterior. En el relanzamiento a partir del giro 66 el mexicano corrió desde el tercer peldaño por detrás de Max y Fernando.
Había carrera nueva con la pista mojada, pero ya nada se movió, el mexicano cruzó la meta en el tercer puesto, sin embargo, la sanción le impidió el podio en una carrera que tuvo de todo.